La
gastritis es una inflamación de la
mucosa gástrica, que es la capa de células que reviste el estomago
por dentro protegiéndolo de la acidez de los jugos gástricos. Aunque no
es correcto, es frecuente que el término gastritis
(dolor o molestias en el abdomen superior, así como síntomas de
quemazón, presión o plenitud relacionados muchas veces, aunque no
necesariamente, con las comidas).
La
gastritis es una inflamación de la
mucosa gástrica, que es la capa de células que reviste el
estómago
por dentro protegiéndolo de la acidez de los jugos gástricos. Aunque no
es correcto, es frecuente que el término gastritis sea utilizado como
sinónimo de
dispepsia
(dolor o molestias en el abdomen superior, así como síntomas de
quemazón, presión o plenitud relacionados muchas veces, aunque no
necesariamente, con las comidas).
Los
síntomas son muy variables, ya que cada
individuo puede experimentarlos de una forma diferente. Los más
frecuentes son malestar o dolor de estómago, náuseas, vómitos, eructos,
ardor, o presencia de sangre en el vómito o en las heces.
Generalmente, el
tratamiento de la gastritis incluye
antiácidos
y otros medicamentos que ayudan a disminuir la acidez en el estómago,
aliviando así los síntomas y favoreciendo la curación de la irritación
de su pared. Si la gastritis está relacionada con una enfermedad o una
infección, también se tratará ese problema.
Por último, se recomienda a los pacientes realizar
cambios en su dieta, evitando ciertos tipos de alimentos, bebidas o fármacos que puedan producir irritación de la pared estomacal.
La clasificación de las gastritis es compleja, pero a modo de resumen
se puede decir que se dividen en aguda, crónica, y formas especiales de
gastritis. A continuación veremos las características en cuanto a
causas, síntomas y tratamiento de cada una de ellas.